Valor de las piezas de Ajedrez

Como todos sabemos, cada Pieza de Ajedrez tiene un trabajo en el Tablero, así como también un movimiento estratégico que conllevan todos. Las Torres y Alfiles por ejemplo, tienen gran similitud de movimiento con la Reina, y el Caballo se destaca por sus movimientos en "L". Pese a eso, el Rey los Peones también son grandes estrategas que no podemos subestimar debido a sus movimientos especiales.

Si hablamos del valor de cada pieza, es algo que quizás muchos principiantes no tengan muy claro o quizás, subestimado; sin embargo, no es de subestimar las opciones de cada uno; por ejemplo, una Dama o Reina es superior en puntos que una Torre y éste, tiene más valor que un Alfil o Caballo.

Si tenemos en cuenta estos pequeños detalles, haremos un repaso de ciertos puntos sobre los valores de estas piezas empezando en orden por el valor más alto.

Equivalencia en peones

Una manera práctica de entender esto del valor de las piezas, es comparándolas con el más noble y humilde de las fichas: el Peón. Con él, nos ayudaremos a evaluar la posición y decidir si cambiar piezas es favorable durante un juego.

Como podemos ver en la siguiente tabla, un Caballo vale 3 veces más que un Peón. Un Alfil también 3 veces más, una Torre cuatro veces y una Reina hasta 9. Pese a eso, un jugador de Ajedrez avanzado no suma estos valores durante la partida, sino que lo determina con uso de su intuición.

Si nos ponemos a pensar si se les asigna un valor estático a las piezas, es mejor desechar esa idea ya que según las circunstancias, puede alterar su eficacia drásticamente. Un ejemplo claro sería cuando un Peón esté por coronarse y valdría mucho más de lo que fue al inicio de la partida.

Valor del Rey

Al Rey no se le puede asignar un valor exacto, ya que su papel en el juego es muy importante y lo pone muy lejos de ser comparado. Es necesario que esté a salvo de cualquier ataque, pero cuando esté en peligro, será necesario ponerlo agresivo hasta que esté libre de este.

Cuando una partida esté llegando a su final, el Rey aumentará su valor como pieza de ataque y es normal que al quedarse casi sin aliados o piezas amigas, tome un comportamiento más agresivo. Su manera de atacar es muy eficiente y tan eficaz como un Alfil o Caballo.

Valor de la Reina o Dama

Pese a ser una gran pieza con grandes movimientos (tanto diagonal, vertical u horizontal) tiene la gran ventaja de tener largo alcance y agilidad.  Aún así, el valor de la Reina es poco más de dos torres o casi lo mismo que tres piezas menores (Alfil y Caballo). Pese a que se mueve como una Torre o un Alfil, la Reina vale más que estas dos combinadas.

Valor de las Torres

Según la tabla de valores, la Torre y un Peón valen lo mismo que un Alfil y un Caballo, pero dicho cambio no se debe llevar  a la ligera, sino con cautela. Las Torres al igual que los Peones les toma tiempo demostrar su valor durante el juego.

Esta ficha es muy eficaz y más valiosa que los Caballos o Alfiles, la Torre debe evitar los ataques de piezas menores. Si una de ellas es llevada a campo abierto muy pronto, se expondrá a gran peligro por parte de los Caballos o Alfiles.

Valor de los Alfiles y Caballos

Pese a que muchos ven al Rey y a la Reina como los más poderosos, y los Peones los más debiles, puede que el verdadero modo de atacar de las piezas intermedias cause confusión. Por ejemplo, las Torres superan a las piezas menores, pero más difícil es comparar al Caballo con el Alfil, ya que ambos tienen una valoración muy igual pese a ser muy distintos.

Las normas dicen que, el Alfil y el Caballo equivalen a unos tres Peones, pero lo cierto es que estas piezas no son equivalentes entres si, ya que el Alfil es ligeramente más valioso (en especial la pareja) ya que dos alfiles pueden poner en Jaque a un Rey solitario, pero dos Caballos no pueden ya que entre ellos se obstruirán y no cubrirán todo el tablero. Cada una se distinguirá más en valor según la posición en que se encuentre dicha pieza para atacar a su contendiente. El Alfil es eficiente a largo alcance con rápidos movimientos pero, limitado a las casillas de un mismo color. Por otro lado, el Caballo puede llegar a cualquier parte sin importar el color pero, tomándose su tiempo.

Por último, si el juego está libre de peones, el Alfil demostrará ser superior en especial, cuando haya puntos muy distantes entre si, logrando ayudar con el ataque y ganar sobre la defensa. Si diera el caso en que los Peones se bloquean entre ellos obstruyendo las diagonales provocando un juego lento, los Caballos son quienes estarán en su gloria y serán muy efectivos.

Valor del Peón

Para muchos, el Peón sólo es una pieza de infantería débil, pero la verdad es que en esa "debilidad", se encuentra su mayor fortaleza. Pese a que el valor de un Peón es sólo 1, defenderá el limite de cada bando con gran eficacia para el control en el campo de batalla; y si se le añade un avance planificado y progresivo, ellos pueden ganar mucho espacio para sus compañeras.

Escapar del ataque de los Peones es razonable, ya que si por ejemplo un Caballlo o una Torre atacan a un Peón, detrás de este puede estar una pieza cubriéndolo y así, tener una perdida de calidad. En cambio, si un Peón ataca a una Torre o Caballo, estos rara veces se mantienen estables incluso, si se protegen contra otra, y está demás decir que su captura supondría la perdida del Caballo o Torre gracias al sacrificio de un Peón.

Calidad en las Piezas de Ajedrez

Si hablamos de calidad, podemos decir que:

El Alfil y el Caballo son las piezas menores o ligeras.

La Torre y la Reina las piezas mayores o pesadas.

Esta diferencia se le conoce como "calidad". Si un bando tiene un Alfil, mientras que el otro tiene una Torre, el bando fuerte será el que tiene "calidad de ventaja". Si un jugador cambia intencionalmente una de sus torres por un Alfil o Caballo, se denomina esto como "sacrificar la calidad".